CÓMO CUIDAR TU BMW EN VERANO
El verano es la temporada perfecta para disfrutar de tu BMW, explorando nuevas rutas y paisajes impresionantes. Nada se compara con la libertad de viajar en moto, en eso seguro que estamos de acuerdo. Sin embargo, si tus planes veraniegos no incluyen a tu fiel compañera de dos ruedas, es crucial asegurarte que esté bien cuidada mientras te tomas un merecido descanso. Hoy te ofrecemos consejos prácticos para mantener tu moto en óptimas condiciones, tanto si te la llevas contigo en tus aventuras como si la dejas descansando en el garaje.
Cuando decides disfrutar del verano en moto hay varios aspectos importantes a considerar para garantizar su buen rendimiento y tu seguridad. Desde la preparación previa hasta el mantenimiento en el camino, estos cuidados te permitirán disfrutar de un viaje sin contratiempos. Mientras que por otro lado, si optas por dejarla en casa, es vital tomar ciertas precauciones para protegerla del calor y de la inactividad prolongada. Aquí te ofrecemos una guía completa para ambas situaciones.
La moto a punto para salir de viaje
Antes de emprender cualquier viaje es fundamental realizar una revisión exhaustiva de tu BMW. Verifica los niveles de aceite, líquido de frenos y refrigerante. Asegúrate de que los frenos, luces y neumáticos estén en perfectas condiciones. Un chequeo detallado en tu taller oficial puede prevenir contratiempos inesperados en el camino.
Lleva siempre contigo un kit básico de herramientas y repuestos, así como un kit de reparación de neumáticos. Si el viaje implica muchos kilómetros, igual convenga llevar contigo algo de aceite de motor y lubricante para cadenas, si es el caso de tu modelo. No olvides tu propio equipamiento adecuado para el clima y la duración del viaje. Casco, guantes, chaqueta, pantalones y botas son esenciales para tu seguridad.
El buen estado de los neumáticos es fundamental para nuestra seguridad y el buen rendimiento de nuestra moto. Verifica la presión y el estado general de los neumáticos, incluyendo el desgaste y posibles daños. Si les queda poco, es mejor cambiarlos antes de emprender el viaje. Considera llevar un compresor portátil para mantener la presión adecuada durante todo el viaje.
Carga el equipaje de manera equilibrada para no afectar la estabilidad de la moto. Utiliza alforjas o maletas específicas y asegúrate de que la carga esté bien asegurada. No sobrepases la capacidad de carga y, para que nada falle, recurre al amplio catálogo de accesorios que BMW ha diseñado para tu moto.
Planifica tu ruta con descansos regulares para evitar la fatiga. Estos descansos también son una oportunidad para revisar nuevamente la moto, asegurarte de que todo sigue en orden y ajustar cualquier detalle que sea necesario.
La moto bien cuidada si se queda en casa
Antes de dejar tu BMW en el garaje, límpiala a fondo para eliminar suciedad, polvo y residuos que puedan dañar la pintura o las partes mecánicas. Lubrica la cadena, si es tu caso, y otras partes móviles para prevenir la corrosión durante el tiempo de inactividad.
El calor del verano puede afectar negativamente a tu moto. Cúbrela con una funda de buena calidad que permita la ventilación, evitando la acumulación de humedad y protegiéndola del polvo y la luz solar directa.
Desconecta la batería para evitar que se descargue. Si es posible, utiliza un mantenedor de batería que mantenga la carga adecuada durante el periodo de inactividad. Esto ayudará a prolongar la vida útil de la batería.
Para evitar deformaciones en los neumáticos, utiliza caballetes o soportes para elevar la moto y mantener los neumáticos sin tocar el suelo. Si no dispones de ellos, mueve la moto ligeramente cada semana para cambiar los puntos de apoyo de los neumáticos.
Llena el depósito de combustible para evitar la formación de condensación en su interior. Añadir un estabilizador de combustible puede ser una buena idea para mantener la calidad del combustible si la inactividad es prolongada.
Asegúrate de que el garaje tenga una buena ventilación para evitar la acumulación de humedad. Si el ambiente es muy húmedo, considera utilizar deshumidificadores o productos que absorban la humedad para proteger las partes metálicas y eléctricas de tu moto.
En verano los amigos de lo ajeno suelen aprovechar para hacer de las suyas, porque mucha gente se va de vacaciones y deja sus casas sin vigilancia. Utiliza un buen antirrobo para asegurar tu moto, si queda sujeta a algún elemento fijo mucho mejor, y si además queda bloqueada por otros vehículos (como aparcar el coche delante) aún estará más protegida.
Cuidar de tu BMW durante el verano, ya sea en viaje o en el garaje, es esencial para mantener su rendimiento y longevidad. Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de tus vacaciones con la tranquilidad de saber que tu moto está en las mejores condiciones posibles. ¡Feliz verano!
