Las superficies de una BMW cuentan con un acabado de primera calidad. Tanto si están pintadas como revestidas con materiales teñidos o metales, solo utilizamos productos de la mejor calidad. No obstante, la sal de la carretera, la humedad y las temperaturas pueden dañar cualquier material. Si debes guardar tu moto durante el invierno, que sea en un lugar cálido y seco, o por lo menos seco. Además, es necesario que la funda que utilices permita la circulación de aire. De lo contrario, aumenta el riesgo de condensación que puede provocar corrosión. Para mayor seguridad, rocía sobre tu moto una capa fina de aceite ligero, como el que se utiliza para dar brillo a las bicicletas. De esta forma, las superficies estarán mejor protegidas contra la corrosión, en especial las metálicas. Te recomendamos que cuando llegue la primavera limpies la moto con un poco de lavavajillas, agua tibia y una esponja suave. Por supuesto, tu servicio de posventa de BMW Motorrad puede ofrecerte más consejos.