Ruedas rompedoras.
Lagos helados, un manto de nieve cubriéndolo todo... Si miras en la distancia, puedes ver cómo se te congela el aliento. Laponia nos muestra su lado más gélido y hermoso. Sin embargo, hoy hay algo diferente: no solo se pueden escuchar los aullidos de los lobos, sino también el rugir del motor de la S 1000 XR. En medio de este telón de fondo invernal, Robert Gull pone en marcha un proyecto insólito: picar hielo con motocicletas
Bienvenido a Laponia
Cerca de la provincia de Kilpisjärvi, el paisaje prácticamente desierto parece sacado de un cuento de hadas. Capas de hielo de varios metros de profundidad en los lagos y nieve hasta más allá del horizonte. A diez grados bajo cero el aliento se congela, y no solo por el frío de este abismo helado, sino porque, junto con el crepúsculo, se forma un paisaje que corta la respiración (no se necesitan decorados artificiales). Las deslumbrantes auroras boreales danzan al son del hielo crepitante en el cielo oscuro. Aquí es donde el aire helado se funde con el calor que desprende el motor de la S 1000 XR.
Robert Gull
El frío se topa con el calor del motor.
El frío se topa con el calor del motor.
Nieve, hielo y motos. Robert Gull no puede imaginar nada mejor. El actual campeón del mundo en hacer el caballito más rápido sobre el hielo ha venido a Laponia a enfrentarse a un nuevo desafío: picar hielo con una moto. A Robert no le importó en absoluto hacer un viaje en coche de 19 horas para este proyecto, hasta lo agradeció, pues ahora no puede entrenar en el lago al que suele ir cuando está en casa debido a que la capa de hielo no es lo suficientemente gruesa. Incluso cuando los tours en moto se cancelan, el padre de Robert siempre está al pie del cañón para apoyar a su hijo. Por supuesto, su misión de picar el hielo no iba a ser una excepción.
Ambos han estado durante 40 horas en el taller de aquí. Los 500 clavos especialmente diseñados se fijaron con cuidado en los neumáticos de las motos. Ayudar a Robert a atravesar de manera segura el lago helado no es su único cometido: hoy tienen una tarea de mayor envergadura. En su viaje a Klipisjärvi, Robert se ha llevado a todo su equipo. «Cuento con un equipo fantástico, que es mi familia». Su madre le da apoyo emocional y le ayuda con su esfuerzo diario. Anders Gull, su padre, es su mecánico de motos personal. Ambos ponen a punto sus motos casi todos los fines de semana. «Si necesito ir a la línea de salida con mi moto, mi padre se asegura de que estemos listos».
Parada en boxes helada.
Parada en boxes helada.
A los que piensan en hielo picado se les viene a la mente un cóctel frío; pero, ¿en qué queda un cóctel sin el ambiente de un bar? A 10 grados bajo cero es fácil encontrar metros y metros de capas de hielo, y lo mejor de todo es que no solo son impresionantes en su forma natural. Cortadas en cuadrados con una motosierra y apiladas unas encima de otras forman un bar de hielo en medio del paisaje desértico de Laponia que completa el escenario de rodaje. Este no es solo el sitio donde finaliza la misión de Robert; también tendrá lugar aquí la cumbre de la película.
Sébastien Chirpaz
Misión picar hielo.
Misión picar hielo.
«Leí el guion y pensé: "¡Qué locura, pero qué idea más brillante!"». Antes de bajar la pantalla y tomar aire, Robert reúne sus pensamientos. ¿Serán capaces él y su S 1000 XR de picar el hielo? Cambio de marchas. Robert no solo puede contemplar las magníficas auroras boreales a través de la pantalla; esta vez, algo muy especial le espera en la recta final: el bar de hielo. El fondo único y el bar de cócteles transparente como el cristal tenían que celebrarse con un broche de oro: hielo picado con motocicletas.
Ahora Robert puede demostrar el arte que tiene su moto: el reto consiste en llenar dos copas de cóctel con hielo picado. Solo contará con la ayuda de los clavos de la rueda trasera de la S 1000 XR. El secreto del éxito es el ángulo correcto, puesto que esta es la única manera de lanzar hielo picado directamente en las copas. Los ojos de todo el equipo están clavados en Robert. ¿Disfrutarán del cóctel con hielo picado con motocicleta en unos segundos?
De nuevo, Robert interrumpe el silencio del idílico paisaje. Enciende el motor. Acelera al máximo. Apaga el motor. Un vistazo rápido y tenso por encima del hombro: lo ha conseguido. Las copas de cóctel están llenas de hielo picado. Después de este subidón de adrenalina, lo que necesita es una cerveza helada, a pesar de las bajas temperaturas. Las copas llenas de hielo picado se mezclan con cerveza bávara en el bar de hielo. Siguiendo la filosofía de Robert, la cerveza es sin alcohol: «Bebe y conduce, solo si es sin alcohol». Y dicho esto, ¡salud y felices fiestas!
